La Fundación Gala-Salvador Dalí y la Diputació de Girona han inaugurado la exposición de los dibujos originales para La Vida Secreta de Salvador Dalí.
El presidente de la Fundación Gala-Salvador Dalí, Ramon Boixadós, el director del Teatro-Museo Dalí de Figueres, Antoni Pitxot y el presidente de la Diputació de Girona, Carles Páramo, inauguraron ayer por la noche la exposición de 126 dibujos originales para La Vida Secreta de Salvador Dalí bajo la cúpula del Teatro-Museo Dalí de Figueres. Al acto también asistieron Montse Aguer, comisaria del Año Dalí, Enric Vilert, diputado de Cultura, Ramon Moreno, coordinador de Cultura de la Diputació, el alcalde de Figueres, Joan Armangué y la concejala de Cultura, Isabel Pineda.
Ramon Boixadós agradeció la gentileza del propietario de 124 de los 126 dibujos que se exponen, así como a la Diputació de Girona el patrocinio de la muestra, de acuerdo con el convenio de colaboración firmado el pasado 25 de junio. Carles Páramo mostró su satisfacción de participar en el Año Dalí con una exposición, cuyo contenido era tan importante para Dalí, y agradeció las facilidades que le ofrece la Fundación para promocionar Girona a través de la imagen y obra de Salvador Dalí. Desde el Patronat de Turisme Costa Brava Girona se potencia la relación del artista con su tierra, que tanto marcó la obra y el carácter dalinianos.
La Vida Secreta de Salvador Dalí
La muestra recoge 126 originales de las 136 ilustraciones para la primera edición de La Vida Secreta del año 1942. La técnica de la mayoría de los cuales es tinta china sobre papel. De estos 126 dibujos que se exponen, 2 provienen de los fondos de la Fundación Gala-Salvador Dalí.
Salvador Dalí escribió su autobiografía a una edad relativamente joven, entre los 37 y los 38 años. En el prólogo del primer volumen de las Obras Completas de Salvador Dalí editadas por Destino, Fèlix Fanés, catedrático de arte de la Universitat Autònoma de Barcelona y asesor del Centro de Estudios Dalinianos de la Fundación Dalí, propone tres posibles explicaciones para la redacción de estas memorias tan tempranas: "¿Tenía tanto que explicar que no podía diferir su relato hasta la edad en la que el arco biográfico muestra su dibujo al completo? ¿Se encontraba en un momento de cambio en su obra tan fundamental que le hacía falta contemplar en perspectiva lo que había sido el trabajo llevado a cabo hasta entonces? ¿O acaso le parecía que era necesario escribir -de hecho "rescribir"- su historia para borrar ciertas tentaciones de juventud, tanto políticas como artísticas, en un momento en que le hacía falta presentarse inmaculado ante los ojos de un público americano, presumiblemente conservador, que aspiraba a conquistar? Es difícil saberlo. Las tres hipótesis son razonables y no tienen por qué ser excluyentes". Antoni Pitxot destacó la ilusión y entusiasmo que Dalí dedicó a este auto-análisis sobre sus recuerdos y vivencias, a la vez que se reafirmaba como voyeur, en este caso, de él mismo. Como buen hijo de notario, Dalí levantaba acta de muchas de sus vivencias mediante la ejecución de un dibujo a tinta sobre papel que fue recopilando a lo largo de unos treinta años y que recoge en la Vida Secreta. Montse Aguer comentó para la prensa algunos de los dibujos, entre los cuales señaló el dedicado a Patufet, a quien Dalí llama "el héroe catalán", a un miliciano de la F.A.I. que llena un vaso con su sangre, a un dibujo con clara influencia picassiana que podría ser un esbozo para el óleo que la Fundación presentó este año Mujeres tumbadas en la arena, a un retrato de Freud con el cerebro en forma de caracol, etc.
La autobiografía La Vida Secreta de Salvador Dalí es una magnífica herramienta para descifrar buena parte del código daliniano. La muestra se puede ver en el tercer piso del Teatro-Museo Dalí de Figueres (sala núm. 13) hasta el 31 de diciembre de este año.