Figueres, 30 de octubre de 2006
Descripción e historia de la pieza
Se trata de un óleo sobre tela con un pequeño ensamblaje de cuerda, realizado en el año 1928, titulado Pescadores al sol. De medidas considerables, 1 x 1 m, fue firmado por el artista con posterioridad a la fecha de ejecución. La obra, de la que hasta ahora sólo se conocía una imagen en blanco y negro, forma parte de una serie que Dalí pintó alrededor del año 1928, y es la primera vez que el público la puede ver. No ha sido adquirida por la Fundación sino que ha sido cedida por el propietario para que se exponga en el Teatro-Museo Dalí, concretamente en la Sala de las Pescaderías.
Esta obra y otras similares parecen inacabadas debido a las zonas de tela blanca, sobretodo si se comparan con otras del mismo año. Las formas que aparecen a menudo parecen incompletas: fragmentos, a veces anatómicos, que se agrupan en los rincones de la tela o bien en el centro. Están pintadas con colores llanos (rojo, negro y azul). A pesar de su apariencia abstracta, continúan estando estrechamente relacionadas con la búsqueda obsesiva de Dalí de formas para representar el sexo, que oscilan entre un erotismo codificado y la representación más sincera posible de la actividad sexual.
La restauración
La intervención que ha llevado a cabo el departamento de Conservación y Restauración ha consistido en un examen técnico completo a través de distintos tipos de luz -visible, infrarroja y ultravioleta- y con microscopio binocular de diferentes aumentos, para verificar la existencia o no de dibujos preparatorios, de restauraciones posteriores y, sobretodo, para conocer más a fondo el proceso de ejecución de esta pintura. Las fotografías y el resultado de estas inspecciones, junto con el de los análisis químicos de micromuestras, se archivan en el departamento de Conservación y Restauración y sirven para ampliar la base de datos de la técnica pictórica de Salvador Dalí. El tratamiento de conservación y restauración se ha centrado por un lado, en la estabilización del proceso de degradación que experimentaban tanto la madera del bastidor, que había sido atacada por xilófagos, como las zonas de pintura negra, que presentaban manchas blanquecinas ocasionadas por hongos y, además, estaban muy craqueladas. Se ha realizado una limpieza de la capa pictórica que se había oscurecido con el paso del tiempo, y se ha llevado a cabo la fijación y reintegración de la capa pictórica negra de las zonas con grietas.
Pescadores al sol presenta dos particularidades que la hacen singular y que, al mismo tiempo, han dificultado el tratamiento de restauración: el ensamblaje de cuerdas y el marco que forman parte de la pintura dificultan el proceso de desinfección, y las manchas y empastes de pintura en el reverso de la tela, que Dalí aplicó posiblemente para limpiar los pinceles, dificultan el proceso de eliminación de deformaciones y consolidación de la pintura craquelada.